Como cambiar la pila de un reloj:consejo

Un reloj es algo más que un objeto que nos da la hora: es una joya que viste nuestra muñeca y que puede acompañarnos toda la vida si le proporcionamos los cuidados necesarios. Evitar los golpes, llevar una correcta limpieza y cambiar la pila son tres de las claves fundamentales que permitirán que nuestro reloj dure casi para siempre. En este caso, en nuestra web de relojes vamos a ver cómo cambiar la pila de tu reloj: una tarea que requiere de paciencia, dedicación y mucho cariño.
Quiero cambiar la pila del reloj: ¿cómo lo hago?
Plantéate primero que puedes acudir a una relojería y dejar esta labor en manos de un profesional: si no sabes dónde cambiar la pila de tu reloj, puedes consultar el modelo en internet o acudir a una joyería o relojería. Seguro que te informarán oportunamente y te indicarán el precio que más se ajuste a tus necesidades y a tu reloj.
Si decides actuar por ti mismo, deberás contar con algunos instrumentos, alguno más fácil de encontrar que otros por casa:
- Alicates de precisión. Puedes usar en su defecto unas pinzas (sí, como las de depilación). Es preferible que uses plástico.
- Destornillador de joyero. Si no tienes, usa un destornillador de cabeza plana de 1.5 mm o 2 mm.
- Navaja de relojero. Es como una navaja normal pero tiene una hoja que no corta, sirve para hacer palanca en la tapa trasera y poder abrir el reloj.
- Guantes. Su uso es opcional, pero el látex o plástico del guante ayudará a que las piezas estén más protegidas durante el proceso, evitando que resbalen de tus manos y que con la grasa de los dedos puedas dañar la pila.
- Lupa o espejo de aumento, para no forzar la vista.
- Pila o batería de reemplazo. Asegúrate que es la pila que tu modelo de reloj necesita y que es de buena calidad.
- Gamuzas suaves y paños secos. Cuenta con ellos para eliminar cualquier mota de polvo que puedas encontrar en la pieza.
- Superficie de trabajo lisa, cómoda y limpia.
- Flexo o luz de escritorio. Para ver bien lo que estás haciendo
Todo buen reloj se distingue por su correa

Es indiscutible que el reloj de pulsera es un complemento imprescindible y no solo por el servicio que presta sino porque un reloj dice mucho de ti.
Así es, constituye una poderosa forma de reflejar tu personalidad y tu estilo. Resulta un toque de distinción ideal y una forma de expresión que transmite tu espíritu. Son sin lugar a duda una auténtica obra de arte.
¿Pero qué sería del reloj sin su correa?
Las correas de reloj han sido una gran solución para un problema que ya se dejaba vislumbrar en la Primera Guerra Mundial. Así es, aunque ya por aquellos entonces, las mujeres lucían relojes de pulsera en sus muñecas, los hombres aún se mantenían fieles a sus relojes de bolsillo. Sin embargo, a la hora de actuar en el campo de batalla pudieron comprobar la aparatosidad y complicación que entrañaba el uso de dicho modelo. Fue en ese preciso instante cuando apostaron por incorporar la correa de reloj entre sus filas.
Cualidades que debe cumplir toda correa de reloj que se precie
En el momento de escoger tu correa de reloj, lo mejor es hacer caso de tu intuición, aunque no debes descuidar unos cuantos aspectos básicos con los que es seguro que triunfarás.